Planificar y controlar los hábitos de vida (practicar deporte, respetar el descanso, alimentación adecuada, manejar el estrés, y evitar el alcohol y el tabaco, etc.) minimizan los riesgos de padecer enfermedades de alto impacto como el cáncer, pero no los eliminan. Ante esta realidad, las pólizas complementarias a los planes de salud se convierten en un respaldo económico para el asegurado y su núcleo familiar.
El cáncer, es una enfermedad de gran incidencia en Colombia. Proyecciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) señalan que durante el año 2018 se presentaron en el país 101.893 nuevos casos de cáncer; cifras de la Cuenta de Alto Costo (CAC) del Fondo Colombiano de Enfermedades de Alto Costo registran 229.374 personas con esta enfermedad; y según el Ministerio de Salud y Protección Social, más de 30 mil personas al año pierden la vida a causa de esta patología.
Aunque en Colombia el sistema de salud contempla atención integral para esta enfermedad, los pacientes con cáncer y sus familias tienen que hacer frente a una serie de gastos adicionales que afectan sus ingresos y calidad de vida.
“Contar con una póliza que entregue una indemnización económica que pueda ser usada, por ejemplo, para contratar servicios de enfermería o transporte, acceder a medicamentos de alto valor o buscar una segunda opinión médica, es una alternativa de protección que puede mitigar en alguna medida el impacto de esta enfermedad", destaca Ivonne Orozco Vasconsellos, Vicepresidente Multiline de Chubb Seguros Colombia S.A.
Esta protección puede ser otorgada por las compañías a sus colaboradores a través de los planes de beneficios. En el caso de Chubb, la póliza especializada para esta enfermedad (Chubb Oncológico), indemniza al asegurado en caso de que reciba por primera vez un diagnóstico positivo de cáncer en cualquier parte de su cuerpo.
Este seguro contempla tres planes: básico, intermedio y superior; incluye cobertura de accidentes personales en caso de muerte accidental, incapacidad total y permanente, y desmembración accidental; y entre las principales exclusiones se encuentran las condiciones preexistentes y/o congénitas y los tumores benignos. Del mismo modo, ha sido diseñado para que los empleadores lo incluyan en los planes de beneficios para sus colaboradores (de acuerdo a sus necesidades) y está al alcance de todas las empresas (sin importar su tamaño, trayectoria o área de producción), pudiendo ser adquirido a través de la red de intermediarios de seguros.
Adicionalmente, Chubb cuenta con un seguro oncológico que puede ser comprado a través de los diferentes aliados comerciales de la aseguradora como bancos, cooperativas y por medio de pólizas empresariales en las que el empleado accede a la póliza de manera voluntaria para él y su familia.